Mayor Eficiencia:
Su instalación consumirá entre 50% y 70% menos energía que los sistemas convencionales.
Cuidado del medio ambiente:
Su instalación generará menos gases de efecto invernadero (CO2), haciéndola más sustentable.
Mayor vida útil:
Los sistemas con tecnología LED de buena calidad ofrecen una duración de 70,000 horas o más,
reduciendo de manera importante los costos de mantenimiento de una instalación (maniobras,
mano de obra, reposición de lámparas y balastros), diferencias significativas con los sistemas
convencionales los cuales alcanzan una vida útil promedio de hasta 20,000 horas y una
depreciación luminosa más acelerada.
Mejor calidad de luz:
la iluminación LED ofrece una mejor calidad de luz que los sistemas convencionales como
por ejemplo el vapor de sodio y el aditivo metálico (cuarzo).
La luz blanca con una alta reproducción cromática ayuda a distinguir mejor los objetos,
personas y vehículos en la noche, así como una mayor agudeza visual al activarse
nuestra visión panorámica.
Compatibilidad con equipos de control:
las soluciones en iluminación son mucho más fáciles de controlar. Su electrónica los hace
compatibles con una amplia gama de sistemas de control, como por ejemplo la tele gestión,
sensores de luz incorporados dentro del luminario, temporizadores, etc.
También permiten el monitoreo remoto y la ubicación de fallas en su instalación.